Tras el polémico posteo que Laura Cartuccia, legisladora provincial de Salta, realizó a través de su cuenta de Facebook en donde se quejaba de vendedores ambulantes y gente pidiendo en un paseo de compras “top” de la ciudad, el titular del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) lanzó una dura crítica contra la diputada y la mandó a capacitar antes de que siga diciendo las cosas que hace pública mediante sus redes sociales.

Gustavo Farquharson lamentó la situación y, aunque Cartuccia intentó bajar el tono de sus polémicos dichos con la vieja estrategia de que la sacaron de contexto y otras excusas que ya nadie le cree, la mandaron a capacitarse para evitar nuevas prácticas discriminatorias.

Lo que sorprende aún más, es que no se haya radicado alguna denuncia formal en contra de la legisladora, lo que demuestra que tanto sus pares como los distintos actores políticos que tiene la sociedad salteña, tienen naturalizada este tipo de actitudes y las dejan pasar como si fueran normales.

Farquharson cuestionó que, en vez de buscar soluciones contra la pobreza, discursos como el de Cartuccia solamente buscan esconder la realidad, cargando con estereotipos a la gente de bajos recursos como son los vendedores ambulantes y aquellos que piden algún tipo de colaboración para subsistir.

En este sentido, de la legisladora en cuestión no se conoce algún proyecto que haya sido presentado (menos aún aprobado) en donde se busque mejorar la calidad de vida de los más necesitados de la provincia. Sin ir más lejos, lo máximo que se conoce de Cartuccia es el plagio de un proyecto de otras provincias conocido como “Ficha Limpia”, que busca que aquellas personas con antecedentes penales no puedan ejercer cargos públicos.

Lamentablemente, dichos discriminatorios como los que ella tuvo de forma desafortunada, y de los cuales hasta el momento no brindó disculpas, no son tenidos en cuenta para ser implementados en la famosa ficha limpia por lo que, a pesar de mucha gente, si ella sigue con las intenciones risibles de ser intendenta de la Ciudad de Salta, tendrá todas las libertades para hacerlo.

Esto sin contar el penoso prontuario con el que cuenta y en donde resaltan polémicas como cobrar 4 sueldos de la administración pública al mismo tiempo o insultar a docentes en huelga durante el último paro realizado el año pasado.