Mazzone, "mudo" tras la sentencia a sus amigas "Pato" Argañaraz y Marita Cerezo
La Asociación Docente Provincial atraviesa su peor momento. Y es que hace apenas unos días atrás se conoció la sentencia a seis años de prisión efectiva contra Patricia Argañaraz, ex secretaria general del gremio y su actual tesorera, Ana María Cerezo, por los delitos de administración fraudulenta y 26 hechos de estafas reiteradas, en calidad de coautoras donde se pidió la inmediata detención de ambas mujeres.
Momentos de dramatismo se vieron en la sala del tribunal donde ambas mujeres escuchaban atentamente la lectura de sentencia. Por un lado, la que en algún momento supo ser la soberbia y vanidosa Patricia Argañaraz, evidenciaba el paso del tiempo en su rostro desmaquillado y demacrado, con un gesto adusto y de cansancio, pero no de arrepentimiento por la cantidad de docentes que estafó cuando estaba al frente de la conducción.
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— CNN Salta (@RadioCNN_Salta) November 26, 2024
Eduardo Romani, abogado de damnificados por ADP en #LaMañanaDeCNNSalta pic.twitter.com/bgYATyPWkP
Afortunadamente, “Krusty” Argañaráz (apodo alusivo al exagerado make up de la ex secretaria) ya goza de unas merecidas vacaciones “bajo la sombra”, en la unidad carcelaria número 4 de Villa Las Rosas.
Por otro lado, Marita Cerezo, quien a leguas se notaba el nerviosismo ya que transpiraba peor que “testigo falso”, mientras se agarraba la cabeza y se quitaba los lentes, quizás sabiendo que ya no tenía escapatoria, por eso es que decidió montar un último teatro donde fingió una descompensación que obligó a la justicia llevarla a un sanatorio para una revisión sanitaria, pero la paparruchada no le sirvió de mucho ya que al día siguiente a primera hora fue trasladada a las “cómodas” instalaciones de Alcaidía Judicial; mientras que Argañaraz ya goza de una “merecidas vacaciones”, en la unidad carcelaria número 4.
La decisión judicial tomó de sorpresa a los afiliados y al ámbito de la docencia, pero no así a Cerezo, quien ya sabiendo lo que podía acontecer, horas antes de comparecer ante los tribunales para conocer la sentencia, llegó hasta las instalaciones del sindicato a bordo de una camioneta y vació su oficina, retirando computadoras y documentación que, según testigos, podían comprometerla aún más. Todo esto bajo la complicidad de actual secretario general de esa entidad, Fernando Mazzone, quien se encuentra recluido, en quien sabe que agujero, esperando a que baje la polvareda y evitando las preguntas incisivas de alguno que otro medio que no tranza con el “El Padrino” (apodo que supo ganarse en la docencia por sus aprietes a los educadores).
Cuentas desde el entorno gremial, que Mazzone está que se come las uñas y que ni el actual concejal y prensa institucional del gremio, Guillo Kripper, le puede salvar las papas con esta situación que viene a empeorar la imagen de su gestión, ya que la fama que hoy pesa sobre el sindicato docente más grande de la provincia, está embarrado por la corrupción, los aprietes, las malas juntas ( dirían las abuelas) y la inacción de Mazzone, a quien la ADP se le está cayendo en la cabeza debido a las numerosas bajas de los afiliados en los últimos meses.