Martín Vestiga
Una producción de NOVA

Martín Vestiga y la sospechosa maestra de jardín

Martín Vestiga, un fiel colaborador de NOVA. (Dibujo: NOVA)

Sagaz como siempre. Intrépido e inquisidor. Adjetivos que sólo califican a Martín Vestiga, un asiduo colaborador de NOVA que vive trabajando y que, en sus ratos libres, investiga como pocos. Todo un adicto a su profesión.

Está claro que los políticos salteños están más preocupados en conseguir renovar o conseguir algún cargo el año que viene, que en cuidar su imagen pública y privada de miradas ajenas.

El utilizar a ídolos mundiales como estrategia, o traspasar los dominios de un municipio para autopromocionarse en un evento masivo, son algunas de las cuestiones que empleó el hoy intendente de Tartagal, Mario Mimessi, para hacer proselitismo en el último fin de semana.

Invitado por mi amiga entrañable Elba Gallo, esa de curvas perfectas que se vino desde donde atiende Dios para asistir de vacaciones a Salta, fuimos hasta el festival del Trichaco, en el interior profundo de la provincia, en Santa Victoria Este donde abundan las comunidades originarias y escasea el agua o los alimentos.

Contentos porque veríamos al Chaqueño Palavecino después de que le revoleó el micrófono a un sonidista, nos dimos con una imagen poco frecuente: El escenario estaba adornado con dos carteles gigantes con la leyenda “Mimessi”, el intendente de Tartagal que reina a 180 kilómetros del lugar en donde se llevó a cabo el encuentro musical.

Sorprendidos por ello, decidimos investigar un poco. A un costado del escenario, cerca del sector en donde van los artistas contratados por Oscar Esperanza, el dueño del evento, vivos una Hilux Blanca ploteada con un círculo rojo y una “M” blanca en el capot. Preguntamos al chofer si podíamos hablar con alguien y nos dijo “sí, ya le aviso a la secretaria personal de Mario”.

A los segundos, apareció una señorita, muy bonita por cierto, con ciertos atributos que la hacían ver algo "sospechosa". Vestida con calza negra y remera blanca con la leyenda “Mimessi️”, la joven le puso el pecho a la situación y preguntó cuál era nuestra consulta. “Porque sí”, atinó a decir la hermosa mujer que desapareció entre los asistentes que iban llegando al lugar mientras hablaba por teléfono con alguien.

Volviendo ya hacia Salta el domingo, paramos por unas paltas en el centro de Tartagal y vimos entrar a una joven, muy parecida sino era la misma, en un jardincito de infantes. El verdulero en carro que cruzamos con las tan buscadas “cuero de sapo” me dice: “Yo que vos ‘Tincho’ no miro para ahí, es la chica del jefe. Por algo le techaron el jardincito mientras las escuelas se caen de a poquito. Preguntá, es una ‘Maza’ la nena”.

Me hubiera acercado sino fuera porque “Elbita” estaba medio insolada y quería volver rápido para que no la agarre la noche en la ruta.

Porque sos mi ABC.

De tu mundo aprenderé .

Porque en mí se alojará tu saber.

Lectores: 459

Envianos tu comentario