Las declaraciones fueron brindadas en el inicio de la apertura de sesiones ordinarias del Poder Legislativo de Salta que tuvo lugar este martes, y en la que estuvieron presentes funcionarios provinciales, senadores y diputados provinciales, entre otros. Esteban aseguró que desde el Ministerio analizaron el accionar de la médica y coinciden en que obró correctamente, con un consentimiento informado a la joven que deseaba interrumpir su embarazo, y que ella misma autorizó la práctica abortiva a través de medicación recetada.

En este caso, los dichos de la profesional de la salud acusada sugieren que la joven en cuestión solicitó hacer la práctica cuando, a esa fecha en agosto del 2021, presentaba un proceso gestacional de 22 semanas y 2 días. Posteriormente, fue la tía de la chica quien radicó la denuncia contra la profesional ya que, según su testimonio, la joven había "manifestado su arrepentimiento" antes de iniciar con el procedimiento. Esto ocasionó que Vega, sin analizar el panorama completo, ordenara la detención de Miranda Ruiz.

Afortunadamente para la profesional de la salud, todo el equipo interdisciplinario que trabajó junto a ella dejó constancia de todas las actuaciones en la historia clínica correspondiente, "con transparencia activa y respetando los principios de autonomía y derecho a la salud de la persona que solicitó el ILE" reza un comunicado de la Regional Salta de la Red de Profesionales de la Salud por el Derecho a Decidir. Tras esto, y la protesta de distintas organizaciones, y luego de haber tenido que sufrir la humillante detención dentro de hospital en donde presta servicio, el juez Fernando Mariscal Astigueta dispuso su liberación de forma inmediata, aunque con ciertas restricciones.

Allí radica el pedido de Esteban que consideró una "aberración" lo que se hizo en el caso, ya que tanto la judicialización del tema, como así también la mediatización causada por grupos provida que terminaron exponiendo a la joven en cuestión. Al respecto aseguró que, aunque hay que esperar el fallo de la justicia, la médica seguirá trabajando, llevándole alivio a la mujer a quien sus defensores, en el pasado mes de febrero, le volvieron a solicitar el sobreseimiento.

Son pocos los médicos que no son objetores de conciencia y son capaces de cumplir con lo que marca la ley, y lo que solicitan las pacientes gestantes. En el propio Materno Infantil, Federico Mangione afirmó que son solo tres los médicos que realizan estas prácticas. Si los siguen persiguiendo, la provincia corre el riesgo de sumergirse aún más en la clandestinidad y los negocios de los abortos ilegales.