Desde que el boleto del colectivo sufrió grandes cambios con la asunción, dicen, del gobierno de Javier Milei; son miles los salteños que presentan problemas a la hora de movilizarse en el sistema público de transporte en el área metropolitana. SAETA, lejos de ser una solución, muchas veces se convierte en una traba para los usuarios que, molestos, piden soluciones urgentes las que no llegan por parte de la empresa. Ahora, un diputado arrojó una idea que podría beneficiar a la gente, aunque se convierte en un arma de doble filo muy difícil de controlar.
Resulta que la Sociedad Anónima de Transporte Automotor, a partir de ahora SAETA, se quedó en el tiempo del romerismo, al parecer, cuando cargar 1000 pesos era toda una odisea y el gasto cubría varios viajes. Desde entonces, el cargar una suma que llegue a las cuatro cifras, ya representa una pérdida de tiempo para el usuario y quien realiza la carga porque debe realizar el procedimiento en dos ocasiones o más, dependiendo de qué monto requiera la persona interesada.
Es que las máquinas que la empresa tiene distribuida en toda la Gran Salta apenas pueden hacer operaciones hasta 999 pesos, lo que representa, hoy en día, solamente dos pasajes de colectivo, un ida y vuelta. Entonces, el hecho de tener que cargar la tarjeta en espacios físicos se torna cansador.
Otra opción es la carga virtual, tanto por la APP que solamente funciona en Android, como por billeteras virtuales como Ualá o Mercado Pago. Lo malo es que estas opciones, no te salvan en caso de apuro o emergencias ya que la carga no se realiza de forma inmediata, sino que se debe esperar, como mínimo, una hora antes de ver impactado el pago que, en este caso, puede ser por sumas de dinero elevadas. Entonces, si te olvidaste de cargar la tarjeta antes de subir, es como si no hubieras cargado debido al excesivo tiempo de demora entre la carga y el impacto real de esta. Eso sí, el descuento es más rápido que inmediatamente.
Aquí es donde entra a jugar el actual diputado y también cantante cumbiero David Leiva. Resulta que "El Negro", conocedor de los barrios debido a su profesión artística, recibió el reclamo de los vecinos y decidió presentar un proyecto para que la empresa Saeta permita el pago del boleto con tarjetas de débito y crédito. Esto, según sus propias palabras, ahorraría el tener que hacer grandes e interminables filas para cargar la tarjeta o los problemas que se generan con la carga virtual.
Sin dudas es un proyecto que despierta alegrías, pero también preocupación. Está mal, pero no tan mal, si se quiere poner en palabras más conocidas. Es que, en el caso de las tarjetas de débito o las prepagas como las de las billeteras virtuales, uno utiliza el dinero que tiene en la cuenta y allí podrá ver en tiempo real el gasto que viene realizando, y llevar un control y manejo correcto de los fondos.
La parte mala está en el uso de las tarjetas de crédito. Seguramente, si se implementa un sistema para éstas, deberá ser con opción única a un pago y no cuantificado. Pero el problema mayor sería la falta de control inmediato por parte de los usuarios, lo que podría derivar, si no se lleva un manejo medido, en grandes sumas de dinero acumuladas durante los resúmenes, por lo que la solución pasaría a convertirse en un problema.
Lo cierto es que el proyecto aún es eso, un proyecto, y puede y debe mejorarse. La idea está buena, hay que pulirla, porque si esperamos soluciones de Saeta...
