
Desde la pandemia, algunas reglas cambiaron en el fútbol. Una de ellas, y tal vez de las más relevantes, tiene que ver con el aumento en el número de cambios de jugadores a realizarse por partido.
Antes del desembarco del Covid solamente se permitían tres sustituciones. Luego del desastre mundial, se extendieron a cinco, aunque con la regla de hacerlos en tres ocasiones llamadas "ventanas". Salvo los cambios en el entretiempo, todos aquellos realizados en plena acción del juego ocupa una de estas posibilidades.
Teniendo en cuenta esto, y entendiendo este segundo mandato como un nuevo partido, las variantes hechas en el Grand Bourg esta semana ocuparían una de las ventanas en juego, lo que deja abierta la posibilidad de nuevas sustituciones hasta finalizar, por lo pronto, el presente 2024. Desde diciembre no se realizaban modificaciones cuando ingresaron como titulares personajes como Mario Mimessi o Cristina Fiore. Ya era hora.
Las primeras víctimas, que salieron con diversas lesiones del campo, fueron Mario "Paragolpe de Falcon" Peña Junior, Sergio "El Mafilia" Chibán, Luis María "Billetera Mata Galán" García Salado, y Marcelo "Gorgory" Domínguez. Además de éstos, hubo alguna que otra remoción con nombres de menor jerarquía.
En Turismo, el área que más desgaste tuvo debido a la inexperiencia de un "joven" empresario hotelero que priorizó el jolgorio por el estatus de una provincia que vive, basicamente, de la visita de turisas; desembarcó Manuela Arancibia.
Tal vez con más cuña que experiencia, la joven tiene una papa caliente en sus manos de cara a la época estival; aunque lo bueno es que no podría irle peor que a su antecesor, Marito Peña chico, quien estaría por tomar la batuta de los negocios del viejo Peña tras el bobazo por el avance de la justicia en la causa de pauta trucha. Aclaramos, viejo es por el sinónimo de padre, y no una cuestión etaria.
Otro de los cambios sensibles, aunque a diferencia de MEP tenía menos tiempo como ministro, fue la salida de Marcelo Domínguez. El ministro de Seguridad, que de seguridad sabía lo mismo que un zurdo obrerista de agua y jabón, tenía las horas contadas, sobre todo desde que empezaron a caer los subordinados como higo maduro en toda la provincia.
Con caer hacemos referencia a los casos de efectivos que cometieron diversos delitos, policías y penitenciarios, y no por aquellos que decidieron desvivirse con las armas reglamenarias. Marce se va tranquilo, dice.
O tal vez conforme. Es que, a pesar de ser primario en la función, lo satisface ser el ministro de Seguridad que más tiempo duró en la gestión de Gustavo Sáenz. Palo para Pulleiro, a quien le gana por un pelo de rana calva; y a su "ñaño" Abel Cornejo, que duró lo que una flatulencia en la mano.
Hasta ahí los "pulentas". El resto, es decorado, aunque resaltan algunos. Por ejemplo Sergio Chibán, el "Mafioso" del "fulbo" salteño, quien no pudo concretar ni uno de los estratosféricos proyectos con los que llegó al Legado Güemes, y le dedicó más tiempo al Bingo de la Liga, al hotel y a su pelea con los Albos de la Vicente López que al deporte local. En su lugar un viejo conocido, Ignacio García Bes.
A quien parece que ya le dan pista para el retiro es a Luis María García Salado. El último romántico, cortejador de jóvenes +50, momentaneamente suegro del "Uluncha" y el terror de la tarjeta Black del banco de Britos, dejó la secretaría de Justicia y en su lugar asumió Verónica Saicha, quien hasta hace un tiempo era una simple acomodada por ser madre del jefe de seguridad provincial; pero que con el tiempo demostró diversas capacidades como el diálogo, el consenso y tardes de mateadas con masitas dulces donde suele imponer su visión bien oficialista. Pobre LMGS, desde que le serrucharon el piso en 2017 que anda yirando.
Como dijimos al comienzo, quedan ventanas para más cambios, y recién empieza diciembre. Por ahí resuena un posible enroque entre Martín "Poncho Tatuao" De Los Ríos y "Beto" Castillo, o una unificación de su "producción" con Flavia Royón que sería la mujer fuerte de la minería local. Cristi, Fede, Robert, Serch y Richard, Keep Calm, por ahora.