
Este sábado se llevará a cabo en Salta la entronización de los santos patronos tutelares para aquellos creyentes de la fe católica. El Señor y la Virgen del Milagro serán bajados de sus camarines para ser colocados a los laterales del altar mayor de la Catedral Basílica.
Allí se quedarán hasta la finalización del culto que tiene su punto culmine con la procesión de ambas imágenes por las calles de la ciudad, realizada tradicionalmente cada 15 de septiembre.
La celebración del Milagro es de las fiestas religiosas más importantes de América, y suele disputar el puesto en Argentina con la Virgen de Luján o la del Rosario de San Nicolás. Aunque los números son engañosos, la procesión suele rondar los 800 a 900 mil fieles, entre los que destacan miles de peregrinos que caminan durante días desde los rincones más recónditos de la provincia.
Esta celebración es muy esperada por todos, entre los que destacan, aparte del pueblo católico, al arco político de cualquier estirpe que suelen aprovechar estas fechas para volverse, durante unos días, demasiado carismáticos, peregrinos de la fe y, obviamente, figuretis ocasionales. Diputados, senadores, concejales, funcionarios y espirantes a políticos suelen aguardar con ansias a septiembre, pero no precisamente por una cuestión religiosa.
Resulta que en Salta es muy común escuchar que una vez que termina el Milagro, se termina el año. Y no es menor. Una semana después de la procesión llegan las festividades del estudiante, de la primavera, algún que otro feriado y, en un abrir y cerrar de ojos, estamos brindando en diciembre.
Este lapso de tiempo breve, poco más de tres meses, marca el inicio de la campaña para muchos cada 2 años.
Y es que el año que viene hay elecciones de medio término. Las locales sueles realizarse antes de la primera mitad del año, y las nacionales finalizando octubre.
Debido a la última reforma de la Constitución salteña, el número de cargos que se ponen en juego en Salta será un tanto menor, ya que los concejales pasaron a tener 4 años de mandato. En diciembre pasado asumió la mitad más votada, y quedó la otra parte que culminan su período a fines del año que viene.
Entre los rostros que ya se pusieron manos a la obra para empezar a caminar barrios, visitar merenderos y besar a cuanta abuela y chico con la carita sucia se le cruce, hay varios que se encuentran preocupados porque, aunque tiran para el mismo lado ya que opositores no hay, el cupo es menor a la cantidad de rostros que quieren anotarse por un lugar en la legislatura o concejos deliberantes.
Resaltan David Leiva que aprovecha su doble vida como cantante para agarrar cualquier evento solidario que surja; Isabel De Vita que empieza a despedirse ya que no tiene la bendición del espacio kirchnerista que jugaría con una ficha del riñón del Oso Leavy y Franco Hernández; Vitín Lamberto que sería uno de los bendecidos por su obediencia estricta; Juan Esteban Romero que participaría dentro de un espacio libertario gracias a su padre; y el médico Bernardo Biella quien, junto a su hija, preparan los incesantes videos para redes sociales.
Del interior, de los fuertes, el mimessismo juega su banca con Santiago Vargas; en Rivadavia originarios y criollos darán pelea; Leguina se jugará en Anta contra los candidatos de Betina Navarro y Orozco deberá decidir si se presenta con Olmedo o el oficialismo.
En el Senado se pone en juego la banca de Capital que sigue abandonada por Gustavo Carrizo; y las de Calabró en La Caldera, las que dejaron Rosso y el "Topo" Ramos en Güemes y Rosario de Lerma; entre otras importantes.
Además, la lucha será a nivel nacional ya que el próximo año vencen los mandatos de Emiliano Estrada, Pamela Calleti y Carlos Zapata. Por el momento los tres serían protagonistas de listas representando a los oficialismos provincial y nacional, y al kirchnerismo moribundo.
Pero la atención estará centrada en el Senado ya que cumplen período Romero, Leavy y Giménez.
Romero sería de la partida por los libertarios. Otro del mismo sector sería el propio Olmedo, y restará definir a un candidato que surja del Grand Bourg.
Falta poco. Pasa el Milagro y termina el año; aunque el electoral recién vería bandera a cuadros en 2025.