Crónica de una candidatura anunciada: Olmedo buscará ser senador nacional por la provincia en octubre

Ya se venía hablando, pero la rosca no paraba. Tal fue así que se requirió de los permisos de la Casa Rosada, quien autorizó la candidatura es el propio Eduardo “Lule” Menem, quien actúa como coordinador político nacional de La Libertad Avanza (LLA) y es hombre de confianza de los hermanos Milei.
Y es aquí donde la cosa se pone rara. Ya desde antes de las elecciones provinciales se sospechan situaciones que o son una buena noticia para todos, o una mala noticia para la estrella mediática salteña, María Emilia Orozco.
Orozco, que es diputada nacional desde el 2023, debe cumplir un mandato. Y esta situación, hablaría muy bien de ella, más en épocas en donde el auto ganador se presenta en cuanta carrera exista.
En Salta, en particular, María Emilia mide, y muy bien. Mucho más que el electo senador provincial el 11 de mayo pasado, Roque Cornejo Avellaneda, o el propio mentor de Orozco, Alfredo Olmedo.
Orozco consiguió algo importante, calificar dentro del espectro de votantes de LLA, por juventud, energía y verborragia. Algo que, por ejemplo, complicó al diputado Carlos Zapata, de muy buenas performances en la Cámara baja nacional, pero con baja aceptación entre el electorado salteño.
Si la decisión fue cumplir un mandato como corresponde, y reservar a María Emilia para más adelante, perfecto. Ahora ¿y si la cosa no fuera tan así y en realidad la candidatura de Olmedo sea más un acuerdo entre poderosos que una decisión atada a la ética y el respeto por la democracia?
Desde un principio se habla de celos dentro de Ahora Patria, el partido Alfredo Olmedo que terminó alquilando la franquicia de La Libertad Avanza en Salta, a fuerza de buenos resultados.
María Emilia Orozco, de bajo brillo en el concejo deliberante de Salta capital, en gran medida debido a los acuerdos que la subyugaban a la figura de José Gauffín (en ese entonces el espacio formaba parte de Juntos por el Cambio), la ex concejal y actual diputada tuvo rienda suelta a las labores verborrágicas una vez se quebrara dicha alianza con los PRO salteños.
De una campaña casi en silencio para renovar en el Concejo, pasó solo un par de meses luego a incinerar a la “casta salteña” en su campaña a diputada nacional. Dos personas completamente diferentes.
Además, Emilia, fue bien recibida por sus pares en Caba. Misma edad, misma onda, mismos intereses y poco contenido, más allá de la defensa irrestricta de un líder que vale por si mismo y al que más de uno le debe la vida. Orozco califica como vocera de Milei, los demás no.
Y aquí llegamos al cuello de botella... ¿El acuerdo en la mesa chica fue “no la dejen crecer a la nena”?
Orozco, negada por completo a compartir fórmula con Juan Carlos Romero, con quien además tuvo diferencias públicas irreconciliables, pareciera hacer más caso en buenos Aires que en Salta, y en este punto, su jefe (paradójicamente) acciona de modo opuesto.
Todas suspicacias, lo cierto es que entramos en una campaña en la que se dirimen 3 bancas al Senado nacional y otras 3 en Diputados. Son número importantes y la posibilidad de negociar no a favor de un partido en si, sinó a favor de la propia provincia de Salta, en donde todos sabemos que más allá de las peles, un par levantan la voz y hasta los más rebeldes terminan haciendo caso. O silencio. Elijan su propia aventura, la campaña ya comenzó.