Lo primero y, tal vez, lo más importante tiene que ver con los recursos económicos. En Salta aún hay quienes sostienen la esperanza de que, como el posible futuro presidente tiene una relación de amistad estrecha con el gobernador Gustavo Sáenz y ya depositó a uno de sus pupilos en el Congreso, el dinero no tarde en llegar.

Claramente podría haber una especie de beneficencia que tenga como destino a nuestra provincia si gana el hoy ministro de Economía, y esas chances serían casi nulas si Javier Milei se erige como ganador.

Detrás del dinero siempre viene el poder. Ambos líderes, Sáenz y Alfredo Olmedo, supieron compartir espacio años atrás y hasta iban a competir uno con otro por la Gobernación en 2019 dentro de un mismo frente.

El ex sojero siempre fue alguien a quien tener en cuenta. Sus participaciones en elecciones legislativas obtuvieron, la mayoría de veces, resultados favorecedores, llegando en reiteradas ocasiones a la Cámara de Diputados de la Nación, ganando la interna de Juntos Por el Cambio y dejando a Carlos Zapata en Buenos Aires, y ahora aliándose con Milei para llevar dos legisladores más a la HCDN.

De esta forma, por sí mismo, logra tener tres de siete legisladores en la cámara baja, manteniendo buenas migas con Estrada que está en el limbo, y quedando tres que responden al actual mandatario provincial. Es decir, en pocas palabras, están iguales.

Sin contar con aparato estatal, Olmedo logró forjar con trabajo de hormiga una estructura fuerte, que sufrió un cimbronazo en las provinciales, pero que sigue manteniéndolo vigente. ¿Y el poder? si gana Milei no duden en que podría perfilarse el 2027 para que la provincia se tiña de amarillo en el mapa político.

Sea cual sea el ganador, en Salta arranca otra discusión a partir del lunes. Dependiendo el color se podrá perfilar quiénes serán los próximos senadores nacionales que cumplen mandato, los tres, en el 2025. De los que hoy están, una no tiene trayectoria propia de peso, otro perdió las últimas pulseadas con el oficialismo y el tercero bota de un candidato a otro para no aliarse al kirchnerismo.

Nora Giménez podría ser un número cantado para retirarse en dos años. La beca que le dieron los salteños por media docena de vueltas al sol no tiene pinta de ser renovada ya que el líder de su espacio, Sergio "Oso" Leavy, no tiene demasiada injerencia en los últimos armados del ex Frente de Todos y del ahora llamado Unión por la Patria.

En 2021 y este 2023 los candidatos puestos por él no pudieron con los electos por el gobernador que terminaron llevándose todo. Por su parte Juan Carlos Romero, de no afianzarse, podría ver peligrar su banca en manos del empresario aceitunero si Milei se mantiene a su lado.