Cabe mencionar que él mismo se incluye como parte de esta historia ya que por tres períodos fue gobernador de la provincia de Salta. Por otro lado, en cuanto al debate de esta ley, reconoció que le hubiera gustado que no abundara el condimento político en medio de las elecciones. “Me parece una barbaridad que por falta de diálogo político lo tengamos que hacer por ley”, resaltó el senador.

Romero también expresó que hubo planes sociales desde el año 83. “Le cambiamos los nombres pero no hemos podido crear empleo de calidad, mejorar la educación, desarrollar una infraestructura y asegurar el progreso del país”, subrayó.

Agregó que esto no es un fracaso de este gobierno ni del anterior, sino de todos los argentinos que hace décadas no pueden bajar los índices de pobreza. “La desigualdad genera consecuencias tremendas. Dejemos de echarnos la culpa entre nosotros y tengamos la humildad de acordar programas que nos saquen hacia adelante”, propuso el salteño.

Por último, continuó analizando la situación del país y remarcó que la crisis, entre otras consecuencias, trae un problema de confianza interna y externa ya que “nadie nos puede creer si ve nuestra trayectoria”.

“Algunos creen en el aislamiento, pero vivir con lo nuestro es vivir con lo puesto. Néstor Kirchner arrancó con un 6 por ciento de inflación, Cristina terminó con el 27 por ciento, este año llegaremos al 50 por ciento. ¿Cómo paramos esto? Estoy seguro de que no es echando la culpa a otros. Debemos encontrar un camino de convivencia y diálogo, y proyectar una Nación seria, responsable y confiable que cumpla con sus obligaciones”, finalizó Romero.