- Sí, claro, cuándo una fuerza de la magnitud de la bonaerense, - hablamos de casi 100 mil efectivos - hace un planteo salarial y utiliza métodos violentos para conseguir sus propósitos, indudablemente tiene un efecto cascada hacia las demás policías provinciales que tienen mucho menor presupuesto y que por supuesto perciben sueldos mucho más bajos. Ud. fíjese que inmediatamente después nueve policías de provincia plantearon el aumento salarial.

Y por supuesto, este tipo de reclamos y manifestaciones generan también inquietud entre la tropa de la policía de Salta, que aunque vive otra realidad percibe salarios muy bajos y puede llegar a creer que este es el camino para conseguir mejoras.

- ¿En qué situación laboral están los policías en Salta? ¿Son escuchados ante disconformidades en sus lugares de trabajo?

- Tengo conocimiento que la situación laboral de los efectivos está muy complicada porque aparte los bajos sueldos, tienen que resignar horas de descanso para soportar recargos muchas veces innecesarios, y eso produce un desgaste importante tanto en el físico como en el ánimo y se agrava cuándo no tienen ningún reconocimiento de sus superiores, que en muchos casos permanecen insensibles ante sus necesidades negándoles cualquier tipo de solución aún ante cuestiones nimias.

Me tocó ser protagonista de una situación desagradable cuando un oficial de Orán, que estaba con síntomas compatibles con covid y se sentía muy mal, desesperado porque no recibía respuestas de sus superiores, me pidió que intercediera para que le consiga atención médica en una clínica. Inmediatamente me comuniqué con el Sub Jefe de Policía, quién rápidamente gestionó la internación del oficial. Sin embargo, su jefe inmediato, el Jefe de la Unidad Regional de Orán, el comisario José Ibarra, pretendió sancionarlo, amenazándolo con sumariarlo por haber recurrido a mi persona, es decir que este jefe, lejos de preocuparse por la salud del oficial, que era lo que le correspondía, antepuso su jerarquía a su obligación de velar por el bienestar de su subalterno, algo que es reprochable en una fuerza verticalista como la policía. La verdad que estas actitudes de soberbia y vanidad por parte de un superior y en esta situación en que nos encontramos termina enervando a la tropa.

- ¿Cuál es el trato que reciben del Ministerio de seguridad en tiempo de Pandemia? ¿Tienen todos los elementos de protección?

- Tengo la impresión que no hay una cercanía entre el Ministerio y el personal policial, lamentablemente desde su inicio, quizás mal asesorado, se tomaron medidas que no cayeron bien en el personal policial y luego la pandemia con todas sus consecuencias contribuyó a que no haya un mayor y mejor diálogo, estimo que en estos momentos dónde existe un descontento es imprescindible bajar al llano y escuchar al personal. En cuanto a los elementos de protección es verdad que se le provee elementos de bioseguridad pero siempre son insuficientes, en parte estas carencias son cubiertas en general por el policía de su propio peculio y también con las colaboraciones solidarias de entidades o particulares.

- Hay efectivos que perdieron la vida por covid sin la atención del Estado. ¿Qué piensa?

- Para mí como ex miembro de la fuerza, que he sido formado por la policía, que me enseñó a tener amor por la institución, y sobre todo porque el agradecimiento que le tengo aún me hace sentir parte de ella, me resulta muy doloroso y triste, porque los conocí y tuve trato con estos héroes, porque para mí son héroes, lamentablemente murieron de forma injusta, inmerecida y eso es indignante, se que la justicia está investigando el maltrato y la desatención que sufrieron y espero que pronto haya resultados para tranquilidad de sus familias. Ahora en mi obligación moral y funcional como miembro de la Comisión de Seguridad de Diputados voy a requerir que se llegue hasta las últimas consecuencias.