En medio de lo que parece ser una tranquilidad política en la provincia tras la amistosa relación entre oficialismo y oposición, esta semana sacudió el arco una vieja disputa que está lejos de solucionarse. La protagonista fue la candente ciudad de Tartagal y el escándalo sacude al ex alcalde y hoy ministro del gabinete provincial, Mario Mimessi; a su sucesor y a uno de sus manos derechas.
Todo inició el pasado lunes. En medio del feriado puente decretado a nivel nacional, iniciaba el período de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante tartagalense. En el año del centenario de la ciudad, despertó especial atención el discurso que daría Franco Hernández Berni, actual titular del ejecutivo municipal, quien debía brindar un balance de lo que encontró, de lo que se hizo en estos meses que lleva en el cargo, y lo que vendrá en el año de gestión.
El joven jefe comunal, ex miembro del equipo del otrora intendente y actual senador nacional, Sergio Leavy, dedicó gran parte de su discurso a su antecesor y lo acusó de haber dejado un municipio fundido. Acusaciones de pago de sueldos con descubierto, y sin equilibrio financiero con administración de fondos irresponsable y despilfarro de dinero; Hernández Berni afirmó que los problemas que heredó son gravísimos, lo que lo llevó a confirmar de forma pública que denunciará a Mimessi por "pérdida de documentación pública".
Lejos de mostrarse asustado o dolido por las palabras del alcalde tartagalense, Mimessi optó por darse un chapuzón en las bendecidas aguas del Chorro de la Peña; un espejo de agua natural muy reconocido en el norte salteño, y al que el actual ministro de Desarrollo Social suele concurrir frecuentemente dejando de lado sus funciones 24/7 al servicio de la comunidad.
Desde ese lugar, luego del discurso de Berni, afirmó que asistió para relajarse, darse un baño y limpiarse las malas vibras y mala onda, en clara referencia a su sucesor. Es que, aunque hoy cuenta con algún grado de protección por su condición de funcionario, nada le asegura que no vaya a pasar algún sobresalto en un posible proceso judicial en contra.
Contrariamente a la tranquilidad que mostró en video en redes sociales, el nerviosismo del ex radical lo llevó a acudir a uno de sus laderos y también ex correligionario, Santiago Vargas, para enviar una dura advertencia a Hernández Berni. Es que el actual diputado provincial por el departamento San Martín, y ex secretario de Gobierno tartagalense, "avisó" que, si la actual gestión municipal no se lleva bien con el ministro Mimessi, serán los vecinos quienes van a sufrir las consecuencias.
"Lo mejor que puede hacer es trabajar con Mimessi" acotó el legislador quien, lejos de retractarse de lo dicho ante la repregunta de un periodista local, aseveró su amenaza. Berni, por su parte, aseguró que no soportarán ser víctimas de aprietes y amenazas. Sigue el culebrón...
