Por su parte, Grande se justificó en exclusiva con este medio aduciendo que las cenas de los graduados cuestan alrededor de 4 mil pesos y es por eso que a ellos les pareció “lógico el precio”. Se sabe que con esta cena se llegó a recaudar 780 mil pesos y en la de Sáenz fue más de un millón de pesos, ya que fueron más de 200 personas las que asistieron, y muchas quedaron sin poder ir debido a que se superó la capacidad.

Cabe destacar que el mismo Sáenz, en sus discursos hace alusión a que su principal rival es el hambre, la desocupación, la falta de oportunidades, pero en este evento no se notó esa preocupación ya que ese dinero, tranquilamente podría haber sido destinado para comedores, merenderos y tantas familias que hoy por hoy sufren necesidades, pero esto no fue ni será así.

Por otro lado, están los que prefirieron presentar a sus precandidatos de una forma más popular, como en las plazas de los barrios, en algunas instalaciones públicas o en las sedes de los partidos, por supuesto de forma gratuita.

Como broche de oro, Martín Grande la terminó de rematar este jueves cuando se realizó una sesión especial para tratar la Emergencia Alimentaria, la cual quedó aprobada casi por unanimidad, pero precisamente él fue el único diputado salteño ausente.

Como conclusión, es entendible el malestar de muchos salteños, los cuales hoy por hoy no tienen un plato de comida en su mesa o cobran de sueldo lo mismo que se pagó por esas entradas, y quienes nos representan tienen tamaña caradurez de hacer un evento de ese tipo. Es por esto que, como mencionamos en el párrafo anterior, precisamente en el Congreso de La Nación se trató y se aprobó una ley como la de Emergencia Alimentaria, que hoy es tema nacional debido a la fuerte crisis económica por la que atraviesa el país.