Cuando me crucé con el segundo camión, y como me considero un conocedor del norte le tomé fotos y al llegar a la ciudad de Salta lo puse en conocimiento de la situación al ministro de Seguridad de la provincia Juan Manuel Pulleiro”.

Al tratarse de una obra ejecutada con recursos de la Nación y concesionada a una empresa privada, me comuniqué con Raúl Vertúa, propietario de la empresa que se había adjudicado la instalación de la cabecera norte del GNEA, inmediatamente realizaron una denuncia al Juzgado Federal de Buenos Aires, y Gendarmería detiene a los camiones en Aguaray”, relató Zigarán.

Ante esta situación, comenzaron investigaciones que llevaron a dar con firmas que involucraban al exintendente Prado.

“Me siento preparado para cualquier desafío, no me sorprende mi nombramiento, porque me conocen en el norte, muchos años arriba de una ruta levantando piquetes, buscando soluciones. El gobernador me mandó a Rivadavia como refuerzo porque entiende que conozco de la problemática. En ese aspecto me siento completamente respaldado por todo el conocimiento que fui adquiriendo porque el norte es muy particular. Lejos estaba de mi, de presuponer que institucionalmente había un municipio involucrado en esta operación, eso sí, me sorprendió”, manifestó.

El interventor dijo que “el único objetivo es volver a transmitir tranquilidad al pueblo de Aguaray, que se caracteriza como pueblo trabajador y ordenado”. “Ya he pedido a la sindicatura un corte presupuestario y patrimonial, entiendo que voy a encontrar un municipio ordenado”. El funcionario adelantó que con la salida del intendente y su gabinete, solo llevara a un contador con él”.