Judiciales y Policiales
Impunidad

Buscan a un hombre que volteó e hizo golpear contra el piso a una mujer que fue derivada al hospital

Elena Farfán de 34 años aún se encuentra en estado delicado de salud

Llegó a la redacción de NOVA el caso de Elena Farfán de 34 años, la cual el pasado sábado 16 tuvo que ser hospitalizada en el San Bernardo luego de que un hombre literalmente “se la lleve por delante” y la voltee de lleno al piso. Al caer, golpeó su nuca contra el pavimento y el hombre cayó con todo su peso sobre ella.

Según el relato, la joven iba caminando a eso de las 20.30 por calle Pellegrini en dirección a calle Mendoza, cuando un hombre de alrededor de 40 años, test morena, robusto y de 1,70 de estatura aproximadamente “se la lleva por delante” cuando ella se encontraba caminando. Farfán explica que este sujeto venía corriendo, al pasar la agarró de los brazos y “no la soltaba”. En ese momento, ella se cruzó de brazos y le pedía que la suelte.

Este hombre le pide disculpas, pero allí la joven pierde el equilibrio y cae con todo el peso sobre la senda peatonal de calle Pellegrini, y el sujeto también se tumbó sobre ella.

Luego de eso, relata “me levanté como pude, sentía que me ardía la cabeza, me zumbaban los dos oídos, y abría cómo podía la boca tratando de recuperar la audición. A todo esto, se agolpó la gente, me socorrieron, pero yo en eso le gritaba a este tipo qué por qué me hizo caer y me decía ‘no me denuncies’. A lo qué le respondí que era un inconsciente, que no sentía mis oídos, me iba en llanto, la policía se acercó y me solicito mis datos, pero nunca le tomaron los datos a esta persona”, aseveró.

La damnificada continuó explicando que este agente que le tomó los datos, al parecer estaba haciendo prácticas y “lo dejó escapar” ya que estaba sólo. Luego de eso, ella misma al sentirse mal llamó al 911 y pidió una ambulancia. Asimismo, cuenta al tiempo llegaron los dos policías que se encuentran en la esquina de Pellegrini y Mendoza y una policía femenina le tomó sus datos.

“La gente me acercó agua y esperé hasta que la doctora Rita del SAMEC me derivó al San Bernardo y me inmovilizo con el collarín. Pero estar con un chichón del tamaño de la concavidad de la palma de tu mano, escuchar la mitad de lo que te hablan, con dolor debajo de los omóplatos, y todo el cuello, estando sola, sin saber qué le está pasando a tu cuerpo, sumado a la angustia del susto, es desesperante”, relató.

Allí en el Hospital la canalizaron, le tomaron una muestra de sangre y le pidieron que avise a un familiar. Luego le realizaron una tomografía y radiografía y pasó la noche en observación. El domingo le dieron el alta, pero debe esperar diez días a ver cómo evoluciona.

Por último, manifestó que “asumiendo que fue un accidente, sin un culpable, porque se fue y nadie lo detuvo. Es sentir en carne propia la impunidad de la inseguridad”. Es por esto que solicita que a través de las cámaras del 911, se pueda encontrar al culpable de lo que le ocurrió.

Lectores: 2608

Envianos tu comentario